Por Rómulo López Sabando
Publicado originalmente en Diario Expreso
Allá por la década del 60, cuando todo era manuscrito, en la prensa de Ecuador se dio "la madre de todas las batallas", que rebasó tradicionales polémicas. Era inaceptable el uso de una "infernal" máquina (xerox), que ya estaba en el mercado, y que tenía un sorprendente y novedoso sistema para reproducir y copiar documentos. Insólito que pudiesen "copiarse" archivos personales y reservados y el trabajo de escribanos y notarios. La privacidad y los derechos de la persona se ponían en riesgo, decían. Pero la tecnología triunfó.
En la década del 80 el "telex" era el más moderno sistema de comunicación y comercio mundial. En Ecuador estaba bajo control y autorización de Ietel, (Pacifictel y Andinatel), monopolio telefónico estatal que alquilaba las máquinas y otorgaba el "answerback", (señal individual que identificaba a un receptor de datos a un transmisor o viceversa, indicando estar listo para recibir datos, reconocer su recibo o enviarlos). Tener una máquina de telex y poseer el answerback era un privilegio, previa corrupta concesión y onerosa tarifa cobrada por el Estado.
En 1986, caminando un domingo por las calles de Hong Kong, encontré un teléfono especial que transmitía (y copiaba) papeles y documentos por el cable telefónico (el fax). Absorto, de inmediato envié por valija diplomática catálogos y precios, en la certeza de que esa maravilla tecnológica sería acogida para remplazar al telex que era lo único que tenía la Cancillería para comunicarse con las sedes diplomáticas.
Pero la respuesta de "mexterior" (Cancillería), por telex, fue: "Déjese de novelerías y dedíquese a trabajar". Pocas semanas después, el país estaba inundado de "fax". Todo viajero traía de Panamá o Estados Unidos, uno o dos teléfonos "fax". Ietel intentó controlarlo y exigir su previa autorización para cobrar "su" tarifa. Pero, fracasaron. Hasta en el uso de los teléfonos "automáticos", (así se conocía al sistema analógico) que remplazó a la operadora, el monopolio estatal fue un fiasco.
La tiranía y corrupción de operadoras y funcionarios fue estigmatizada por el ex Presidente Arosemena Monroy, quien les espetó: "Es necesario que Ietel muera para que la patria viva". Ahora, (noticia del 28 de junio), Conartel, "recomienda no adquirir televisores digitales hasta no adoptar un sistema de tecnología definida, que constituye un riesgo (¿?), ante la eventualidad de que dicho formato no sea aplicado por el país (¡!)". Hace más de un año resolvieron conformar y presidir un 'Grupo técnico de Televisión Digital', (¿?) integrado por gremios, Comando Conjunto de FF.AA. y Organismos Técnicos para la adopción de la "guía de implementación de radiodifusión y de televisión terrenal digital (ttd) aprobada por la Citel', dentro del proceso de introducción (¿?), a la tecnología de televisión digital al Ecuador".
Estamos igual que Venezuela que, según EFE y América Economía, tiene planes para que las transmisiones de televisión, con formato digital, se realicen en diez años. Esperan "elegir" el sistema de transmisión entre los existentes, estadounidense, europeo y japonés para "escoger" (¿?), el sistema vinculado a las posibilidades de "democratizar la señal, al uso eficiente del espectro, a la capacidad de disponer de una televisión móvil y a los acuerdos con los dueños de los royalties (regalías)". Recién en 2018 las transmisiones serán digitales.
La tecnoburocracia de Conartel, ajena al mundo y a la tecnología, está "planificando pruebas y mediciones en estándares existentes para evaluar, según la disponibilidad del espectro, la situación socioeconómica y el impacto (¿?), que ocasionaría la adopción de uno u otro estándar". ¡Qué risa! Las comunicaciones de Ecuador son al revés. Viven el mundo del revés.
Ecuador debe decidir entre los 3 estándares de Tv digital: ATSC creado en Estados Unidos, DVB-T de origen europeo y el ISDB japonés. Todos ellos son incompatibles entre sí así que si por ejemplo un canal de televisión transmite en ISDB es imposible que un televisor ATSC pueda mostrar imagen alguna.
ReplyDeleteLa estrategia norteamericana consiste en haber lanzado al mercado televisores capaces de recibir indistintamente señales NTSC (el sistema actual) y señales ATSC, con el objetivo que al tener ya varios televidentes con los televisores de su formato exista presión para que el sistema ATSC sea el escogido.
La sugerencia de la CONARTEL es correcta pues es muy probable que el sistema ATSC de USA no sea elegido como nuevo formato, pues en la evaluación para ver cual es el mejor el ATSC tiene la desventaja que proviene del "Imperio Yanqui", y conociendo todas las discriminaciones de las que ha hecho gala el Gobierno de Correa lo más probable es que sea descartado de entrada.
Aclaro que no soy partidario que se seleccione el ATSC porque el formato europeo DVB-T es mejor y tiene varias ventajas sobre el formato estadounidense, pero finalmente esta decisión debe ser tomada haciendo estudios serios y minuciosos, y ojalá que al final sean los criterios técnicos y no los políticos los que den la última palabra.